El concentrado de pescado es un buen fondo de nevera. En unos minutos estará listo y tendrás un rico caldo para preparar sopa los días que no tienes tiempo ni para respirar. Lo puedes usar como base para un arroz, una fideuá o lo que te apetezca. Y lo más importante, ya no tendrás que usar productos con conservantes y aditivos, siempre sabrás lo que hay en tu plato.
Puedes hacer cubitos para congelar, pero tendrás que rellenar unas cubiteras de silicona o no se desmoldaran fácilmente. Recuerda que la sal dificulta la congelación, por eso es mejor guardarlo en la nevera, cuando el caldo este frio, se conserva fresco durante varios meses en el frigorífico.
Utiliza una cucharadita por cada 500 gramos de agua para hacer un caldo de pescado. También puedes ponerlo directamente a guisos, arroces…
Ingredientes:
500 gramos de pescado y marisco variado, mejor si es de agua salada, bacalao,lubina, gambas,langostinos..
300 gramos de sal marina gruesa.
1- Lava bien el pescado, quítale la piel y las espinas y pela el marisco. Sécalo bien con papel de cocina.
2- Ponlo en el vaso y tritura, 1 minuto, velocidad 6.
3- Pon la sal, 20 minutos, 100 grados, velocidad 1. Coloca el cestillo en vez de el cubilete.
4- Cada 5 minutos interrumpe la cocción y espuma el caldo.
5-Quita el cestillo, pon el cubilete y tritura, 1 minuto, velocidad 9.
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